Teatro: El Extranjero – Valentín Goméz 3378-
Funciones: Martes 21:00 hs
Entrada: $120
Dramaturgia y Dirección: Maruja Bustamante Objetos: Carolina Villacorta Músicos: Sonia Alvarez Diseño de vestuario: Candelaria Aaset Diseño de luces: Javier Casielles Fotografía: Marcos López Escenografía: a77 Puesta en escena: Maruja Bustamante Actúan: Monina Bonelli, Iride Mockert Prensa: Debora Lachter
Río que vas creciendo,
río que vas naciendo,
vuelve a los brazos de tu dios:
y que te devuelva más de lo que esperás.
(fragmento canción “Rio” Como Diamantes Telepaticos)
Dos mujeres viajan en bote sobre el rio Paraná, un rio apasionado y revuelto, que las llevará a soltar sus sentimientos y pescar sus emociones, mientras van en busca de tierra firme, en Córdoba: Alto en las montañas. Las acompañan una brújula, que parece que no anda, una vaca acuática, un embarazo avanzado, una lanza y mucha querencia. Todo esto viajara sobre este torrente que atraviesa mucho más que la mitad de Nuestra América. Maruja Bustamante vuelve a sorprender con una obra futurista, lejana pero cercana a la vez, con personajes entrañables, duras, pero por sobre todo: traicionadas.
La travesía se realiza sobre un barco muy particular, el cual es timoneado de diversas maneras, siempre al ritmo del arpa – musicalización en vivo muy intensa- a cargo de las gloriosas manos de Sonia Alvarez, lo cual alimenta todo lo fantástico que contiene el texto y agrega un elemento autóctono. La Gringa y la Polaca comparten un viaje y antes compartieron un hombre: el gran amor de ambas. Una esta embarazada, otra no y durante este periplo coordinaran de manera exquisita monólogos recordando aquellos tiempos de noviazgo, de amor zonzo, cuando el brillo de los dientes blancos de aquel que ya no esta, las enamoró.
La Gringa es encarnada por Monina Bonelli, lleva en su vientre el fruto de su amor infinito, un tanto naif, maestra de escuela con ciertos temores, intenta sobrevivir a La Polaca, interpretada por Iride Mockert, de armas traer, como también recuerdos y resentimientos. El dúo que conforman estas dos mujeres tan diferentes entre si, pero con tanto en común, es coronado con un perfecto monologo al unisono que despliegan cada vez que recuerdan ese amor único.
Sin duda Bonelli y Mockert dejan todo sobre el escenario, dando todo de si para contribuir a este microcosmos tan de Maruja Bustamante, quien nos regala un texto maravilloso que recorre todos los climas, los estados anímicos y las etapas de una odisea imperdible.
JULIA PANIGAZZI
jpanigazzi@catarsistextual.com.ar
crítica originalmente publicada en www.asalallena.com.ar